UGT pone en valor que Navarra comience el año con la cifra más baja de personas desempleadas en un mes de enero desde 2008, pero llama a no caer en la autocomplacencia ya que es indispensable seguir mejorando la creación y la calidad del empleo desde todos los ámbitos para mejorar la inserción en el mercado laboral de las personas con más dificultades y acabar con las desigualdades existentes.

El paro ha subido en 675 personas en enero en Navarra respecto al mes anterior, un aumento del 2,25%, en línea con el comportamiento habitual del mercado de trabajo en los meses de enero, caracterizado por el fin del periodo navideño. En relación al mismo mes del año anterior, el desempleo ha descendido un 4,17%, una senda que hay que intensificar para seguir reduciendo el paro en la comunidad.

Asimismo, un mes más, los datos publicados por el Ministerio de Trabajo y Economía Social vuelven a reflejar que el paro tiene rostro de mujer. En este sentido, las mujeres representan el 60,62% del total de personas desempleadas en Navarra, frente al 39,38% de los hombres, a lo que se suma la parcialidad no deseada que sigue discriminando a las mujeres y ahondando en las desigualdades. Todo ello, reafirma la necesidad de seguir impulsando medidas eficaces para reducir la brecha existente.

En cuanto a la contratación, en el mes de enero se registraron 23.025 contratos en Navarra, un 2,42 menos que hace año, de los cuales un 21,42% fueron indefinidos y un 78,58% temporales. A juicio de UGT, que haya menos contratos no es  un aspecto negativo, sino un indicador de que la reforma laboral está funcionando y permitiendo que las relaciones entre trabajador y empresa se desarrollen un marco de mayor estabilidad laboral.

En cualquier caso, el sindicato insiste en que es necesario seguir incidiendo en acabar con las desigualdades del mercado laboral mejorando la situación y la inserción laboral de las mujeres, las personas jóvenes y los parados de larga duración, al mismo tiempo que hay que acabar de completar las cuestiones que quedaron pendientes hace dos años como la reforma del despido o la reducción de la jornada laboral.